Vamos a ver, asturkick, pues sí que estás tu enterado.
Porque es Lorena no Elena.

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Y sobre la noticia en sí... pues bueno, vale.
Los partidos que habitan posiciones cercanas al centro político viven siempre convulsionados entre los que, desde dentro del partido, miran con mejores ojos a la derecha política y los que miran con mejores ojos a la izquierda.
En la época de Albert Rivera y su deseo de dar el sorpasso al Partido Popular, abandonaron el partido muchos de los que no se sentían representados por ese intento de ocupar el espacio de la derecha española.
Ahora, parece que toca el turno a los que critican que Ciudadanos busque acuerdos y haya pactado en algunas cosas con el Partido Socialista, así que se marchan, como es el caso de Lorena Roldán.
No pasa nada. Todo es previsible. Antes unos, ahora los otros.
España es un país que vive permanentemente y necesita la confrontación y el frentismo de unos contra otros, así que los espacios ilustrados de moderación siempre lo han tenido complicado.
En el caso de Lorena Beltrán, supongo, también son importantes las aspiraciones y egoísmos personales de buscarse acomodo en un proyecto, se supone que de mayor enjundia para asegurarse ciertas migajas. Así que no derramo ni una sola lágrima por su salida.
Que le vaya bien y enhorabuena por su decisión, porque clarifica las cosas.
Y mi más absoluto respeto y apoyo a la estrategia de Inés Arrimadas en el Estado español.