Yo no sé nada de la vida de este señor, fuera de los pocos datos biográficos que puse, así que no sé si habla de boquilla o predica lo que hace. Puesto que eso me incapacita para hablar de su vida y sus acciones, me limitaré a comentar los pocos textos que estamos discutiendo.Ver citas anterioresBelenguer escribió:Sí, sólo conozco de este hombre lo puesto aquí por usted.
Estoy de acuerdo con él con que la verdad es solitaria.
Habría que comprobar cómo realmente se sacrificó este hombre por los demás, a parte de a base de escribir libros y dar charlas. Por lo que dice, proclama el desapego de todo lo humano y el amor que dice sentir creo que es más bien un placentero éxtasis místico individual, y un contemplar individual de la obra de Dios, más que un sacrificar efectivo por los demás.
Tampoco estoy de acuerdo con su frase de que moriría por la verdad, morir por la verdad es un absurdo ya que sólo se muere por cosas que pasan en el mundo, si muere por su verdad es que quiere morir defendiendo esa verdad ante los demás, lo cual es un absurdo si proclama que la verdad es solitaria. La verdad es independiente del mundo, una vez sumergidos en el mundo y dejada la verdad de lado, todo es humano. Una vez en el mundo, la verdad es humana, con sus apegos, y sus seudo verdades humanas.
Yo creo que por las frases citadas se deduce claramente un panteísmo. No dice que admira la obra de Dios, dice que se siente observado por todos los objetos, de lo que deduzco que es Dios el que le observa a través de todas las cosas, por que Dios está en todo, o es todo, se podría deducir.
De nuevo, y no te lo tomes a mal, pero es que me sorprende ya, creo que estás leyendo en diagonal o tú mismo te has hecho un batiburrillo mental de los cuatro conceptos que has leído o es que el lente con el cual interpretas sus palabras es muy distinto del mío:
Ya has dicho antes que no estás de acuerdo con lo que "dice" de que la verdad sea la ausencia de ego y te he corregido: él no dice eso, dice que el silencio es la ausencia de ego. Ahora me vienes con que no estás de acuerdo con lo que dice de morir por la verdad. Pero es que tampoco dice eso. Dice literalmente:
Y esto no solo es una afirmación universal y no personal, sino que a la verdad no la nombra por ningún lado.Ver citas anterioresÚnicamente vives cuando descubres un tesoro por el que estarías dispuesto a morir.
Por mi experiencia, creo que tiene buena parte de razón. Cuando vives por alguien o por algo es cuando realmente pones toda la carne en el asador y cuando realmente te entregas en cuerpo y alma, no ya a ese alguien o ese algo, sino a vivir. Lo demás, con sus altos y bajos, alegrías y tristezas, no deja de ser un "pasar los días".
Ni dice nada de que tengas que desapegarte de todo el mundo y vivir en una campana de cristal en comunión con Dios. ¿De dónde deduces tú eso? Es que no lo veo por ninguna parte. El único sitio donde menciona el apego es en la cita que te pongo a continuación y lo que dice viene a ser más o menos lo contrario de lo que tú interpretas:
A ver, que da igual, no estoy diciendo que te tenga que gustar este señor, faltaría más, estás en tu perfecto derecho de estar en desacuerdo con él, pero entonces que sea porque estás en desacuerdo con lo que él dice, y no con lo que tú te inventas que él dice.Ver citas anterioresLa primera cualidad del amor es su carácter indiscriminado, no juzga lo exterior como bueno o malo. La segunda es su gratuidad, da sin pedir nada a cambio, no cuando es un camuflaje de tu egoísmo. La tercera es la falta de autoconsciencia, su espontaneidad. El amor disfruta de tal modo amando que no tiene la menor consciencia de sí mismo. Y la cuarta es su libertad. En el momento en que entran en juego la coacción, el control o el conflicto, en ese mismo momento muere el amor.
¿Y qué es lo que te impide amar? Tus conceptos, tus categorías, tus prejuicios y proyecciones, tus necesidades y apegos, los “clichés” que tú mismo has elaborado a partir de tus propios condicionamientos y experiencias pasadas. “Ver” es la más ardua tarea que un ser humano puede emprender, porque requiere una mente alerta y disciplinada, y algo más doloroso: liberarte del control que la sociedad ejerce sobre ti.
Ahora bien, una vez que has probado eso que llaman amor, sabrás que ningún precio es demasiado elevado y ningún sacrificio demasiado grande, cuando a cambio se puede obtener la única cosa en el mundo por la que merece la pena vivir.