La UE ratifica el acuerdo de libre comercio con Nueva Zelanda y espera cerrar Mercosur antes de final de año
Planea concluir el acuerdo de libre comercio con Chile en las próximas semanas
Los Veintisiete Estados miembro tratan de dinamizar sus relaciones con nuevos socios comerciales, especialmente tras la invasión militar rusa de Ucrania, que ha obligado al bloque a diversificar y mirar a nuevos horizones. Los ministros de Comercio de la UE han ratificado este lunes el acuerdo de libre comercio con Nueva Zelanda y allanan el camino para zanjar el acuerdo con Chile en las próximas semanas y el de Mercosur antes de finalizar el año.
La ratificación del acuerdo de libre comercio, que se cerró el pasado julio con el país austral, está pendiente aún de que Nueva Zelanda culmine su parte de la tramitación. La alianza pretende liberalizar el intercambio de bienes y fomentar las inversiones entre ambas regiones, considerando que el bloque comunitario es el tercer socio comercial del país austral.
El vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, ha explicado en rueda de prensa que este paso supone un "hito" en la agenda de comercio de la UE. Y es que permitirá reducir en 140 millones de euros anuales los impuestos que pagan las empresas europeas durante los primeros doce meses de aplicación.
Además, el comercio bilateral "aumentará un 30%", con lo que las exportaciones podrían aumentar a 4.500 millones de euros. La inversión en Nueva Zelanda alberga un potencial de "crecimiento del 80%", según el comisario letón. Todo ello considerando que en 2022 el comercio entre ambas regiones alcanzó los 9.100 millones de euros.
El acuerdo de libre comercio con Chile está también a punto de cerrarse. La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha puesto sus esperanzas en el próximo 5 de diciembre como fecha para cerrar el pacto, de manera que pueda estar firmado antes de finalizar el año.
Ha sido especialmente optimista respecto al acuerdo de libre comercio con los países de Mercosur, para el que prevé un consenso antes de final de año. Desde el punto de vista técnico, ha explicado, "hay pocas cuestiones sobre la mesa", aunque "no se puede decir que todo esté cerrado hasta que esté cerrado", el acuerdo nunca estuvo "tan cerca".
Las esperanzas están puestas en el encuentro de alto nivel que tendrá lugar el próximo 7 de diciembre en Brasilia. Aunque la perspectiva del comisario letón se deposita en poder cerrar el acuerdo antes de final de año, en línea con las intenciones marcadas por la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula Von der Leyen, y en un intento por dotar de seguridad económica a la UE tras la invasión de Rusia en Ucrania.
Cabe recordar que España, en calidad de presidencia rotatoria del Consejo de la UE, se propuso como objetivo cerrar el acuerdo de libre comercio con Mercosur durante este semestre. Tras veinte años de negociaciones, el pacto como tal se cerró en 2019. No obstante, falta que los países del otro lado del Atlántico adopten un anexo en el que se establezcan ciertas demandas de sostenibilidad medioambiental adicional, como compromisos en el ámbito de la deforestación.
El acercamiento a Nueva Zelanda
En lo que respecta al acuerdo de libre comercio con el país austral, contempla ciertos elementos como la eliminación de todas las tarifas en ciertos productos que se exportan de la UE a Nueva Zelanda, entre ellos el vino y el vino espumoso, el chocolate, productos de confitería y galletas, según ha detallado el vicepresidente económico de la Comisión Europea.
Además, supone la apertura del mercado de servicios de Nueva Zelanda en sectores clave como las telecomunicaciones, el transporte marítimo, los servicios financieros o los servicios de entrega. Mejorará también el acceso de las compañías europeas a los concursos públicos del país de bienes, servicios, obras y concesiones de obras.
Por otro lado, garantiza la protección de ciertos productos de origen europeo, entre ellos vinos como el Rioja o el Proseco, pero también queso manchego o queso feta. Contempla también facilidades para impulsar las exportaciones de las pequeñas y medianas empresas, reduce los requisitos para permitir un flujo más ágil de mercancías y protege los derechos de propiedad intelectual en línea con los estándares comunitarios.
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