Este aeropuerto es una ruina.
Publicado: 02 Mar 2015 15:38
http://www.zoomnews.es/343563/actualida ... o-es-ruina
Berlín-Brandeburgo, este aeropuerto es una ruina
La nueva infraestructura aérea de la capital alemana debía haber abierto sus puertas hace más de dos años
Cuando empezaron las obras, en 2006, la idea de los gastos rondaba los 2.000 millones de euros; las últimas cifras ofrecidas superan los 8.000 millones
El responsable del aeropuerto reconoce que las instalaciones ya se han quedado pequeñas, a pesar de no estar inauguradas
El Aeropuerto Berlín-Brandeburgo tenía por misión jubilar a los de Teggel y Schönefeld. Sin embargo, este par de añejas infraestructuras continúan metabolizando el ir y venir diario de aviones que sobrevuelan la capital alemana. Y así seguirá siendo durante una buena temporada. El Aeropuerto Berlín Brandemburgo debía haber abierto sus puertas hace más de dos años, pero retrasos, sobrecostes, escándalos de corrupción y errores en cadena han convertido este lugar en un monstruoso ejemplo de cómo puede torcerse un prometedor proyecto de gran envergadura. En los medios de comunicación –incluida la prensa seria– el nuevo aeropuerto berlinés aparece bajo el apelativo de Pannenflughafen, "aeropuerto-calamidad".
El fiasco que ha supuesto en el mundo de la aviación civil el Aeropuerto de Berlín-Brandeburgo Willy Brandt (bautizado con el nombre del canciller de la Alemania Occidental entre 1969 y 1974) ya integra el imaginario colectivo planetario. Así, ante los retrasos que impuso la constructora estadounidense Bechtel a los responsables del finalmente estrenado en abril Aeropuerto Internacional Hamad de Doha, hubo jefes cataríes que trataron de meter prisa a la firma norteamericana manifestando que ellos no fracasarían como en Berlín. "Les diré algo, lo que pasa con Berlín no va a ocurrir en Doha", señaló en su día Akbar Al Baker, directivo de Qatar Airways.
Razones tenía Al Baker para estar exasperado con el trabajo de Bechtel. Porque la empresa estadounidense – la misma que se quejó de que Sacyr no tendría con su oferta "ni para hormigón" en las obras de ampliación del Canal de Panamá – contribuyó más de lo suficiente para que el flamante aeropuerto de Doha se abriera trece meses después de lo esperado.
El secreto para levantar un aeropuerto envidiable en términos de desperdicio de recursos no es ajeno a las desarrolladas sociedades del norte de Europa. En éstas, de hecho, hay más capacidad para meter la pata, si se atiende al todavía vacío Aeropuerto de Berlín Brandemburgo. Éste es, en superficie, tres veces mayor que el de Castellón y, en teoría, debía ser el tercero con más tránsito de Alemania. De inicio, debería ver pasar unos 27 millones de viajeros anuales. Sólo los aeropuertos de Múnich y Fráncfort tienen más pasajeros, 38 millones y 58 millones, respectivamente.
Sobrecostes en continuo crecimiento
En el Aeropuerto de Berlín Brandemburgo parece que las obras nunca terminan. No estuvieron acabadas para octubre de 2011, momento inicialmente previsto para la inauguración, ni en junio de 2012, cuando la apertura fue igualmente cancelada. Este año, allá por el mes de febrero, Hartmut Mehdorn, el responsable del aeropuerto, avisó de que sería más razonable esperar que las instalaciones puedan funcionar con normalidad en 2016.
Los sobrecostes, por su parte, no paran de crecer. Cuando empezaron las obras, en 2006, la idea de los gastos rondaba los 2.000 millones de euros. Seis años después, ya se había doblado esa cantidad. El pasado mes de abril, se hizo público que los costes debían alcanzar los 5.400 millones de euros. En mayo ya se hablaba de 6.000 millones de euros y, el diario populista Bild, ha citado fuentes del Ministerio de Economía del Land de Brandemburgo, donde se sitúa el aeropuerto, cifrando el proyecto en 8.000 millones de euros.
En este contexto, el economista Friederich Thiessen, de la Universidad de Chemnitz, ha señalado en un reciente estudio que, incluso en funcionamiento, el nuevo aeropuerto berlinés costará 150 millones de euros anuales al erario público. Por si fuera poco, el propio Mehdorn ha reconocido que las instalaciones ya pueden haberse quedado pequeñas, y eso que ni siquiera se han estrenado. "Los últimos cálculos muestran que el Aeropuerto Berlín Brandemburgo abrirá para unos 30 millones de pasajeros. Llegados a este punto, ya es demasiado pequeño", dijo el responsable sobre su aeropuerto.
La razón oficial por la que éste no está abierto a día de hoy, según recuerdan a ZoomNews fuentes aeroportuarias, reside en los "problemas con el sistema de protección de incendios". En el aeropuerto, prefieren no hablar de las responsabilidades de la empresa que lidera el grupo de compañías que hacen las obras, la Flughafen Berlin Brandenburg GmbH, ni mencionar a Alfredo di Mauro. Este técnico, desvinculado desde hace poco del aeropuerto, logró hacerse pasar por ingeniero y participar así en el diseño de la defectuosa protección contra el fuego que presentan las instalaciones.
Aunque por fuera parezca que todo el aeropuerto está más o menos acabado, las revelaciones hechas por la prensa sobre el estado del interior del edificio principal distan mucho de una infraestructura preparada para abrir sus puertas. Así, el cableado todavía es un asunto por resolver, así como la distribución del espacio, pues parte de los 4.000 cuartos del lugar han sido numerados de forma incorrecta. Al parecer se han detectado hasta 66.000 errores en las obras a los que hay que poner remedio. En definitiva, el cerca de medio millar de obreros que lidian con este panorama aún tienen mucho trabajo por delante.
Lo mismo pasa con los investigadores que estudian hasta qué punto uno de los máximos responsable técnicos del aeropuerto, Jochen Großmann, pudo aceptar sobornos de una empresa asociada a las obras tal y como se ha publicado en la prensa. Si este sinfín de reveses complican la construcción del aeropuerto, depurar responsabilidades resulta aún más difícil. "Es muy complicado señalar claramente a alguien en este caso, es todo muy complejo, con muchas y muy potentes empresas implicadas, como Siemens"”, apuntan a este medio de comunicación desde la redacción del diario berlinés Der Taggespiegel.
También será muy difícil que próximamente los viajeros disfruten de la experiencia de volar a partir de las pistas del Aeropuerto de Berlín Brandemburgo. Pero quienes se acerquen por aquí estos días podrán disfrutar, si hacen la visita, de algo de música en directo. El próximo 10 de agosto se organiza un concierto de jazz a cargo de la orquesta Deutsche Oper Berlin. La cita lleva el título de Taking off with music, "despegar con música". A falta de aviones, hay que buscar otros medios para volar en este aeropuerto, aunque sea en sentido figurado.
Berlín-Brandeburgo, este aeropuerto es una ruina
La nueva infraestructura aérea de la capital alemana debía haber abierto sus puertas hace más de dos años
Cuando empezaron las obras, en 2006, la idea de los gastos rondaba los 2.000 millones de euros; las últimas cifras ofrecidas superan los 8.000 millones
El responsable del aeropuerto reconoce que las instalaciones ya se han quedado pequeñas, a pesar de no estar inauguradas
El Aeropuerto Berlín-Brandeburgo tenía por misión jubilar a los de Teggel y Schönefeld. Sin embargo, este par de añejas infraestructuras continúan metabolizando el ir y venir diario de aviones que sobrevuelan la capital alemana. Y así seguirá siendo durante una buena temporada. El Aeropuerto Berlín Brandemburgo debía haber abierto sus puertas hace más de dos años, pero retrasos, sobrecostes, escándalos de corrupción y errores en cadena han convertido este lugar en un monstruoso ejemplo de cómo puede torcerse un prometedor proyecto de gran envergadura. En los medios de comunicación –incluida la prensa seria– el nuevo aeropuerto berlinés aparece bajo el apelativo de Pannenflughafen, "aeropuerto-calamidad".
El fiasco que ha supuesto en el mundo de la aviación civil el Aeropuerto de Berlín-Brandeburgo Willy Brandt (bautizado con el nombre del canciller de la Alemania Occidental entre 1969 y 1974) ya integra el imaginario colectivo planetario. Así, ante los retrasos que impuso la constructora estadounidense Bechtel a los responsables del finalmente estrenado en abril Aeropuerto Internacional Hamad de Doha, hubo jefes cataríes que trataron de meter prisa a la firma norteamericana manifestando que ellos no fracasarían como en Berlín. "Les diré algo, lo que pasa con Berlín no va a ocurrir en Doha", señaló en su día Akbar Al Baker, directivo de Qatar Airways.
Razones tenía Al Baker para estar exasperado con el trabajo de Bechtel. Porque la empresa estadounidense – la misma que se quejó de que Sacyr no tendría con su oferta "ni para hormigón" en las obras de ampliación del Canal de Panamá – contribuyó más de lo suficiente para que el flamante aeropuerto de Doha se abriera trece meses después de lo esperado.
El secreto para levantar un aeropuerto envidiable en términos de desperdicio de recursos no es ajeno a las desarrolladas sociedades del norte de Europa. En éstas, de hecho, hay más capacidad para meter la pata, si se atiende al todavía vacío Aeropuerto de Berlín Brandemburgo. Éste es, en superficie, tres veces mayor que el de Castellón y, en teoría, debía ser el tercero con más tránsito de Alemania. De inicio, debería ver pasar unos 27 millones de viajeros anuales. Sólo los aeropuertos de Múnich y Fráncfort tienen más pasajeros, 38 millones y 58 millones, respectivamente.
Sobrecostes en continuo crecimiento
En el Aeropuerto de Berlín Brandemburgo parece que las obras nunca terminan. No estuvieron acabadas para octubre de 2011, momento inicialmente previsto para la inauguración, ni en junio de 2012, cuando la apertura fue igualmente cancelada. Este año, allá por el mes de febrero, Hartmut Mehdorn, el responsable del aeropuerto, avisó de que sería más razonable esperar que las instalaciones puedan funcionar con normalidad en 2016.
Los sobrecostes, por su parte, no paran de crecer. Cuando empezaron las obras, en 2006, la idea de los gastos rondaba los 2.000 millones de euros. Seis años después, ya se había doblado esa cantidad. El pasado mes de abril, se hizo público que los costes debían alcanzar los 5.400 millones de euros. En mayo ya se hablaba de 6.000 millones de euros y, el diario populista Bild, ha citado fuentes del Ministerio de Economía del Land de Brandemburgo, donde se sitúa el aeropuerto, cifrando el proyecto en 8.000 millones de euros.
En este contexto, el economista Friederich Thiessen, de la Universidad de Chemnitz, ha señalado en un reciente estudio que, incluso en funcionamiento, el nuevo aeropuerto berlinés costará 150 millones de euros anuales al erario público. Por si fuera poco, el propio Mehdorn ha reconocido que las instalaciones ya pueden haberse quedado pequeñas, y eso que ni siquiera se han estrenado. "Los últimos cálculos muestran que el Aeropuerto Berlín Brandemburgo abrirá para unos 30 millones de pasajeros. Llegados a este punto, ya es demasiado pequeño", dijo el responsable sobre su aeropuerto.
La razón oficial por la que éste no está abierto a día de hoy, según recuerdan a ZoomNews fuentes aeroportuarias, reside en los "problemas con el sistema de protección de incendios". En el aeropuerto, prefieren no hablar de las responsabilidades de la empresa que lidera el grupo de compañías que hacen las obras, la Flughafen Berlin Brandenburg GmbH, ni mencionar a Alfredo di Mauro. Este técnico, desvinculado desde hace poco del aeropuerto, logró hacerse pasar por ingeniero y participar así en el diseño de la defectuosa protección contra el fuego que presentan las instalaciones.
Aunque por fuera parezca que todo el aeropuerto está más o menos acabado, las revelaciones hechas por la prensa sobre el estado del interior del edificio principal distan mucho de una infraestructura preparada para abrir sus puertas. Así, el cableado todavía es un asunto por resolver, así como la distribución del espacio, pues parte de los 4.000 cuartos del lugar han sido numerados de forma incorrecta. Al parecer se han detectado hasta 66.000 errores en las obras a los que hay que poner remedio. En definitiva, el cerca de medio millar de obreros que lidian con este panorama aún tienen mucho trabajo por delante.
Lo mismo pasa con los investigadores que estudian hasta qué punto uno de los máximos responsable técnicos del aeropuerto, Jochen Großmann, pudo aceptar sobornos de una empresa asociada a las obras tal y como se ha publicado en la prensa. Si este sinfín de reveses complican la construcción del aeropuerto, depurar responsabilidades resulta aún más difícil. "Es muy complicado señalar claramente a alguien en este caso, es todo muy complejo, con muchas y muy potentes empresas implicadas, como Siemens"”, apuntan a este medio de comunicación desde la redacción del diario berlinés Der Taggespiegel.
También será muy difícil que próximamente los viajeros disfruten de la experiencia de volar a partir de las pistas del Aeropuerto de Berlín Brandemburgo. Pero quienes se acerquen por aquí estos días podrán disfrutar, si hacen la visita, de algo de música en directo. El próximo 10 de agosto se organiza un concierto de jazz a cargo de la orquesta Deutsche Oper Berlin. La cita lleva el título de Taking off with music, "despegar con música". A falta de aviones, hay que buscar otros medios para volar en este aeropuerto, aunque sea en sentido figurado.