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gálvez escribió:Lo sucedido fue bochornoso desde muchos ángulos.Pero eso en ningún caso minimiza la responsabilidad del gobierno que es quien se supone debe de llevarse la parte del león en la asunción de responsabilidades en estos casos.
A mi debe de informarme el gobierno, no debe de mentirme ni ocultarme la verdad.
Los jerifantes del PSOE serían unos oportunistas a su entender,pero quienes estaban incumpliendo sus obligaciones en el cargo y quienes estaban comportandose cómo un gabinete de partido y no de estado eran los señores del gobierno.
Si el gobierno no hubiese mentido ni manipulado miserablemente no le habrían dejado a la oposición la oportunidad de protestar por esos actos.
saludos
Estimado, Gálvez, aún a riesgo de resultar cansino, aquí te dejo la cronología de los hechos acaecidos entre el 11 y el 14 de marzo de 2004, y como podrás observar si tienes a bien tragarte el mamotreto, te he subrayado aquello que para mí demuestra que el PSOE estuvo en todo momento del lado de la versión oficial del gobierno en funciones hasta que las evidencias demostraron que el gobierno estaba mintiendo y ocultando información, así como alguna que otra evidencia y/o detalle que demostraba que al PP lo único que le importaba era evitar la derrota electoral, porque lo que son las víctimas y los heridos le importaban tres cojones...
ATENTADOS 11 DE MARZO 2004, CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS.
JUEVES 11 de marzo de 2004: A las 7 horas, 36 minutos y 47 segundos de la mañana: el teléfono de Emergencias de la Comunidad de Madrid, el 112, recibe una llamada escalofriante...” explosión en Santa Eugenia “. A las 7.52, Iñaki Gabilondo interrumpió el normal desarrollo de su programa para informar de lo sucedido. Poco tiempo después da paso al periodista Severiano Donate que se encuentra en el lugar de los hechos, para que relate lo que está viendo....” la imagen es muy perecida a las que vemos en Jerusalén cuando explota un autobús. Veo dos vagones reventados. Hay muchísimos heridos. Puede haber víctimas mortales”. Habla Iñaki Gabilondo de nuevo...” parece que ETA está detrás de todo esto, y asoma con su lenguaje habitual de miedo, horror e ira. Esta es la impresión que todos tenemos. Son las ocho y siete minutos “.
A las 9.30 de la mañana, el lehendakari, Juan José Ibarretxe se sitúa frente a las cámaras de TV y dice: los terroristas son simplemente alimañas. Qué monstruosidad, que espanto tan grande...ETA está escribiendo sus últimas páginas. Nada más terminar su intervención, recibe una llamada de Arnaldo Otegui, que jamás ha condenado un atentado de ETA, le muestra su enfado, y le dice... la izquierda abertzale no contemplamos, ni como hipótesis, la posibilidad de que sea ETA. ETA a lo largo de su historia siempre ha avisado de la colocación de explosivos....”. Sobre las 10 de la mañana, a Luis del Moral, jubilado ferroviario, el portero de la finca le dice que ha visto a unos individuos muy raros salir de una furgoneta, la cual sigue allí aparcada. Le pregunta si ha avisado a la policía, y el portero le dice que no. Sin más preámbulos, ve un coche de la policía, y se lo comenta a los funcionarios. A los cinco minutos, un K de la policía (vehículo camuflado) se presenta en el lugar. La furgoneta es transportada en una grúa a las dependencias policiales de Canillas.
A las 11 horas de la mañana, el ministro Acebes convoca al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón a una reunión en el ministerio del Interior. Un policía local, Jacobo Barrero, encuentra una bomba sin explotar en la estación de El Pozo. Los artificieros del TEDAX le ponen un cebador y la hacen explotar. El policía olfatea el ambiente...” un artificiero guarda en su memoria todos los olores que puede llevar la muerte, según el explosivo que la inspire”. En la estación de El Pozo, el aire acaba de quedar impregnado de un olor picante, intenso. No puede tratarse de cloratita, cuyo olor se parece a las pastillas de potasio para aclarar la garganta; ni a Titadyne del que posee ETA, robado en Francia y gastado hasta tal punto de que no huele más que a humo. El aire tampoco huele a amoniaco, y por tanto no es atonal. La bomba, piensa el artificiero, está compuesta por dinamita, una sustancia gelatinosa parecida a la plastilina. La policía ya tiene la primera pista.
En el Palacio de la Moncloa, el presidente Aznar está reunido con los ministros Rodrigo Rato, Javier Arenas, y Eduardo Zaplana, con el secretario de Estado de Comunicación, Alfredo Timmermans y con el Secretario General de la Presidencia del Gobierno, Francisco Javier Zarzalejos. Al rato llega Acebes, el cual ha mantenido contactos con los mandos policiales, Gallardón y Esperanza Aguirre. Aznar telefonea a Zapatero, y le espeta...” espero que no haya dudas de que es un atentado “. Aznar pronuncia enseguida la palabra ETA, como presunta autora de la matanza, y anuncia la convocatoria de una manifestación para el viernes 12. El convocante es el Gobierno, no los partidos políticos. La Moncloa inicia una intensa labor “informativa“. Es Aznar quién llama personalmente a algunos directores de periódicos españoles. Las conversaciones son muy breves, y en todos los casos hay una frase que suena a estribillo...” Y no tengas dudas de que ha sido ETA “.
Javier Arenas, vicepresidente segundo del Gobierno, telefonea al líder de IU, Gaspar Llamazares. Mantienen una conversación muy seca, que apenas dura un minuto....” La manifestación será a las siete. Espero que estéis allí”. Allí estaremos, contesta Llamazares. De forma paralela, una funcionaria de Moncloa llama a los periodistas extranjeros destinados en Madrid. También les insiste en la autoría de ETA. Un corresponsal le pide las razones de esta conclusión. La funcionaria, que obedece órdenes, responde que son cuatro las razones. Una: porque utilizan los mismos explosivos, una mezcla con dinamita de la marca Titadyne. Dos: porque los terroristas están ansiosos por cometer un atentado en Madrid. Tres: porque ETA siempre tarda unas semanas en reconocer la autoría del atentado. Y cuatro: porque el modus operandi responde al operativo preparado para la noche de Navidad cuando ETA pretendió cargar de explosivos el tren Irún- Madrid.
La secretaria termina su llamada con una frase que siempre es la misma: “podéis decir que esta información procede de fuentes de la Moncloa “. A las 13.30, el ministro Acebes comparece de nuevo ante la prensa. Anuncia 173 muertos y 600 heridos y expresa su creencia de que ETA es la autora del atentado. Califica de “absolutamente intolerable cualquier intoxicación por parte de miserables “. Se refiere a lo dicho por Otegui unas horas antes. Acebes no anuncia que la policía tiene un testigo. Pero lo hay. Cuando el testigo es conducido a dependencias policiales para tomarle declaración, el testigo dice: “Y este impresentable dice encima que no ha sido ETA “, refiriéndose a Otegui. El testigo no sale de su asombro, cuando uno de los policías que va en el coche le dice...” es que no ha sido ETA “.
En el siguiente informativo, por la radio del camuflado se escucha la voz de Acebes asegurando que ha sido ETA. Uno de los policías comenta en voz baja...! Y este todavía sigue con que es ETA ¡.
A las 13.45, Zapatero no se aparta un milímetro de la tesis oficial...” Estamos ante el atentado más horrendo de ETA “. A continuación, ofrece un mensaje de unidad de las fuerzas políticas: “Me dirijo al Gobierno y a las fuerzas políticas para decirles que este es, más que nunca, el momento de la unidad democrática frente al terrorismo. Los terroristas tiene que saber que sus crímenes son tan atroces como inútiles “. Tres cuartos de hora después, a las 14.30, es el momento de Aznar. Su primera frase es contundente: “El 11 de marzo de 2004 ocupa ya su lugar en la historia de la infamia. Aznar hace una referencia a las víctimas, comunica que se han decretado tres días de luto y anuncia la convocatoria de una manifestación. Califica a los terroristas de asesinos y fanáticos y habla de la banda terrorista. Pero en ningún momento pronuncia la palabra ETA: “Somos una gran nación cuya soberanía reside en todos los españoles. Quien decide es el pueblo español. Nunca permitiremos que una minoría de fanáticos nos imponga nuestras decisiones sobre nuestro futuro.
Los asesores de Zapatero escuchan atentamente las palabras de Aznar desde una televisión en Ferraz. Les choca que no pronuncie la palabra ETA. Se lo comentan a Zapatero, y él responde: “Si el Gobierno dice que es ETA, estamos con el Gobierno “. En esos momentos la furgoneta Renault Kangoo con un cartucho de dinamita, y siete detonadores es conducida a las instalaciones que tiene la policía en Canillas. Los investigadores que trabajan sobre el terreno no contemplan la hipótesis de ETA. Miguel Sebastián, hombre fuerte de Zapatero, llega a Madrid procedente de Canarias. Al poco de llegar, recibe una llamada desde Washington. Es un antiguo compañero de Universidad, un colega que trabaja en el mundo de las finanzas con buenas conexiones en la Casa Blanca. El interlocutor le quiere hacer llegar un comentario acerca del atentado: “Miguel, es Al Qaeda “. ¿Es fidedigna esta información? le inquiere Sebastián. “Al noventa y nueve por cien “, le contesta su amigo.
Cuatro de la tarde en Madrid. Diez de la mañana en Nueva York. El Consejo de Seguridad de la ONU comienza un debate rutinario sobre África. Chencho Arias, está en Viena, y le sustituye la nº 2 de la misión española, Ana Menéndez. En Nueva York, Ana Menéndez, toma la palabra para solicitar la aprobación de una resolución urgente de condena a ETA por los atentados de Madrid. La reunión se celebra a puerta cerrada. El representante alemán propone matizar la nota de condena y no señalar directamente a ETA o establecer el término “supuestamente “. Otro experto muestra su extrañeza de que, apenas diez horas después de estallar las bombas, los autores ya estén identificados. El embajador argelino, Abadala Baali, advierte: “Si dentro de dos días las pistas apuntan hacia otra dirección, será muy embarazoso”. En el pabellón del IFEMA, los familiares de las víctimas esperan información. Nadie habla. Nadie se refiere a ETA ni a Al Qaeda. Sin embargo en Nueva York ya existe desde las 12.15 (18.15 en España) una condena oficial “en los términos más absolutos de los atentados perpetrados en Madrid por el grupo terrorista ETA “.
El día 15 de marzo...Chencho Arias se verá obligado a enviar una carta al presidente del Consejo de Seguridad, el francés Jean- Marc de la Sabliére, pidiendo disculpas. España, alega Arias, “obró de buena fe “. A las 17.28 sale un mensaje desde el ministerio de AA.EE a todas las embajadas. Tiene carácter reservado. Asunto: “Atentado de ETA en Madrid “. El texto garantiza que el atentado es de ETA por varias razones: “mismo explosivo y mismo patrón de comportamiento, así como otras informaciones que aún no se han hecho públicas por razones obvias “. Y alude a una fuerza política que intenta confundir sobre la autoría. Se refiere a Batasuna.
El mensaje, dirigido a los embajadores, concluye con una petición expresada de forma telegráfica: “ Deberá de aprovechar aquellas ocasiones que se le presenten para confirmar autoría de ETA de esos brutales atentados, ayudando así a disipar cualquier tipo de duda que ciertas partes interesadas puedan querer hacer surgir entorno a quién está detrás de estos atentados. Y si lo considera oportuna, puede acudir a los medios para exponer estos hechos. La policía científica trabaja cuidadosamente sobre la furgoneta abandonada por los “chicos de aspecto raro “. A la vista de la cantidad de fallos y pistas dejadas, no hay ningún indicio que conduzca a ETA. Los indicios que obran en poder de la policía llegan hasta la sede del PSOE en Ferraz, así como el descubrimiento de la furgoneta y la cinta en árabe. A pesar de todo, Interior sigue insistiendo en que el explosivo es el habitual en ETA.
Hay nerviosismo en la calle y nerviosismo en el Gobierno. En el ministerio del Interior se han habilitado unos despachos para que los expertos en terrorismo de los distintos servicios Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil y CNI se coordinen lo más posible. No es el día apropiado para que los celos profesionales se manifiesten. Es lógico que la policía lleve el hilo de la investigación, dado que el atentado ha tenido lugar en su demarcación. Lo que no parece tan lógico es que un coronel y un general de la Guardia Civil, expertos en terrorismo, tengan que esperar durante horas antes de que les dejen participar en la investigación. Acebes se reúne a las 18.30 con los responsables de Seguridad. Tienen ante la mesa los resultados de la inspección en la furgoneta y la línea de investigación que lleva horas abierta. Sabe también que la aparición de la furgoneta se ha filtrado. Convoca una conferencia de prensa para las 20.15. En Moncloa, Aznar reabre el capítulo de llamadas institucionales. Habla con Zapatero. Le informa del hallazgo de la furgoneta y de la cinta del Corán. Le dice que eso obliga a abrir una segunda línea de investigación.
La conversación vuelve a ser muy breve: “Seguimos pensando que es ETA “. Las 20.15. Acebes comunica a la opinión pública el hallazgo de la furgoneta. Afirma que ha dado orden de no descartar “ninguna hipótesis “sobre la autoría de los atentados, pero remacha: “La línea esencial sigue siendo ETA “. Aznar hace una segunda llamada a los directores de los periódicos y corrobora las palabras de Acebes: “ La prioridad sigue siendo ETA “. A las 20.30, el Rey ofrece un discurso de 15 minutos. No menciona a ETA. La hipótesis ETA está a punto de esfumarse completamente. A las 19.40 suena un teléfono móvil en el interior de una bolsa de deportes depositada en la comisaría de Vallecas.
José Blanco, secretario de Organización del PSOE, habla en un par de ocasiones con Gabriel Elorriaga, responsable de la campaña electoral del PP. La segunda es muy breve. Blanco no puede reprimirse y le suelta una frase: “Esto apesta a Al Qaeda, Gabriel“. La comunicación se “corta”. Elorriaga se “queda sin batería “.
La agencia Reuters informa a las 21.30 de que se ha recibido una carta en el diario londinense Al-Quds Al-Arabi, editado en árabe. Un grupo ligado a Al Qaeda reivindica el atentado. La noticia tiene repercusión internacional aunque su valor sea dudoso. A las cinco de la madrugada, todos los componentes de la bomba desactivada en Vallecas están depositados encima de una mesa. Hay un detalle que les lleva a un lugar ya conocido. Algo en el teléfono les trasporta al 24 de enero de 2003, cuando esos mismos policías detuvieron a 16 argelinos y marroquíes en Barcelona y Girona, por su presunta relación con Al Qaeda y una red de salafistas escindida del Grupo Islámico Armado (GIA).
VIERNES 12 de marzo de 2004: este viernes amanece con una llamada pendiente. La noche anterior, dos expertos de la UCI-1 (grupo de élite de la Guardia Civil especializado en la lucha contra ETA) se han quedado plantados a la puerta de un despacho del complejo de Canillas, donde el Cuerpo Nacional de Policía está organizando la búsqueda de los criminales. El general Varela, jefe de los grupos de Información de la Guardia Civil, llama desde su despacho de Guzmán el Bueno a Jesús de la Morena, su homólogo en la Policía: “ Jesús, anoche dejasteis plantados a dos de mis hombres “. De la Morena, se disculpa abiertamente, sin recurrir a subterfugios.
Le anuncia al general que esa misma mañana se celebrará otra reunión y que por supuesto que quiere que la Guardia Civil esté presente: “Eso sí, hoy no me mandes gente de la UCI-1. Mándamelos de la UCI-2. La UCI-2 es el grupo que lucha contra el terrorismo árabe. A esta hora, diez de la mañana, la policía ha dejado de buscar a terroristas de ETA. Las pesquisas se centran abiertamente en el terrorismo de origen islámico.
Sin embargo, el presidente del Gobierno, a las 11.30, en una comparecencia ante la prensa posterior al Consejo de Ministros, solo apunta en una dirección: “Esta organización terrorista está para matar todo lo que puede y eso es lo que hace y a veces lo consigue. ¿Acaso no sabíamos que disponía de documentos internos que consideraban a los medios de transporte objetivos de la organización ?.. Aznar se refiere a ETA, pero nunca la llega a mencionar. Da rodeos de este tipo: “La banda terrorista bien conocida en nuestro país....”. O más tarde: “Una organización terrorista que tanto conocemos aquí....”. Y también: “Esa organización terrorista....”. Pero cuando un periodista le pregunta directamente por cual de las hipótesis se inclina el Gobierno, el presidente responde: “Estamos ante un atentado terrorista terrible, no me pidan que juegue a las quinielas”. En el Palacio de la Moncloa, Aznar está a punto de finalizar su conferencia de prensa. Finalmente, aprovecha la ocasión para enviarle un “mensaje” a José Blanco, que unas horas antes ha puesto en duda, en diversas emisoras, que el Gobierno esté ofreciendo toda la información disponible: “El Ejecutivo ha dado toda la información.
No hay ningún aspecto que conozca el Gobierno que no se haya puesto en conocimiento de la opinión pública”. La policía tiene encima de la mesa algo más que indicios. Pruebas. Una furgoneta que no tiene la matrícula doblada, huellas dactilares, ropa usada por los terroristas, detonadores, 10.2 kilos de dinamita Goma2-ECO que estaban dentro de una bolsa de basura azul, un teléfono móvil con tarjeta prepago, un “modus operandi “. Los expertos en terrorismo árabe trabajan a pleno rendimiento. Una bolsa de basura azul, por ejemplo. Detalles como este se difunden fuera de los estrictos límites del complejo policial de Canillas. Algunas de las conclusiones, también. En la sede del PSOE de la calle Feraz se maneja información de que todos los caminos de la investigación apuntan hacia el terrorismo islámico. De la existencia de esas filtraciones tiene también conocimiento el ministro del Interior. Este hecho incomoda al Gobierno, que empieza a perder capacidad de maniobra ante la opinión pública. Los hechos se suceden de forma vertiginosa. Quedan seis horas para que se celebre una manifestación contra el terrorismo.
El Gobierno insiste en mantener viva la hipótesis de ETA como prioridad en la investigación. Los otros partidos comienzan a ponerlo en duda y a exigir que diga lo que realmente sabe. Desde el mediodía, la línea de comunicación entre el Gobierno y el PSOE se ha cortado. Aznar no vuelve a informar a Zapatero. A las seis de la tarde, Ángel Acebes, anuncia una nueva comparecencia para las 18.30. Hace casi 24 horas que se descubrió una mochila bomba. No puede retrasar por más tiempo el anuncio de un descubrimiento tan importante, máxime cuando este hallazgo se ha filtrado. Por si fuera poco, se acaba de producir una llamada al diario Gara y a la radio televisión pública vasca (EITB): “La organización ETA quiere hacer saber que no tiene ninguna responsabilidad en los atentados ocurridos ayer en Madrid “. Acebes hace una detallada exposición de las pruebas en manos de la policía y reconoce que se “abren nuevas posibilidades en la investigación “. Pero su línea argumental no se aparta un milímetro de la expuesta en sus últimas intervenciones: “ETA sigue siendo la principal línea de investigación “.
Manifestación a las ocho de la tarde en Madrid. El recogimiento que durante casi una hora preside el recorrido, se rompe, y estalla en un grito cuando llega Aznar: ¿Quién ha sido? ¿ Quién ha sido ?. Mariano Rajoy pregunta una y otra vez: ¿ Que está pasando?. La pregunta en sí es una respuesta. El candidato del PP ha estado todo el día de emisora en emisora, haciendo declaraciones, sosteniendo las tesis del Gobierno, alejado, en cualquier caso, de lo que se está cociendo en la calle y de lo que está pasando en Interior. Su pequeño círculo de colaboradores, tiene más información de lo que está sucediendo en la opinión pública por gente ajena al Partido Popular. Once millones de españoles se han echado a la calle en distintos puntos del país. Se percibe una mezcla de desconcierto y pena, de miedo y de indignación por no saber contra quién hay que lanzar los gritos de protesta. Al llegar a la manifestación el presidente Aznar y su Gobierno, piensan que los pitos y los abucheos de “¿quién ha sido?” no son espontáneos, sino que proceden de algún grupúsculo organizado. Se sorprenden cuando observan que la protesta no amaina según avanzan, En Cataluña, la cosa pasa a mayores. El vicepresidente en funciones Rodrigo Rato, y el ministro también en funciones, Josep Piqué, son abucheados durante todo el recorrido. Al final, los escoltas los tienen que sacar prácticamente en volandas por el túnel de un aparcamiento público. A las 22.30 del viernes no empieza la película que tenía que empezar. En lugar de “Vidas Paralelas “, el director de Telemadrid decide su sustitución por “Asesinato en febrero “, que narra la muerte del parlamentario socialista vasco, Fernando Buesa, y su escolta, Jorge Díaz, asesinados por ETA en el año 2000.
SÁBADO 13 de marzo:
Eduardo Zaplana comparece en La Moncloa a las 13.30. Su intervención no se limita a una declaración, es toda una conferencia de prensa en medio de una jornada de reflexión. Zaplana expresa el “agradecimiento emocionado” por los 11.642.000 ciudadanos que el viernes salieron a la calle para manifestarse contra el terrorismo. Se abre el turno de preguntas y todas se dirigen hacia el mismo punto. ¿ Mantiene el Gobierno la autoría de ETA ?. “ Algunos parece que quieren descartar que pueda ser la banda criminal y asesina ETA, cuando todo apunta, salvo que se demuestre lo contrario y hay líneas de investigación en marcha de las que se ha dado cuenta, que desde luego no nos debería causar ninguna sorpresa que fueran los criminales y asesinos de la banda terrorista ETA”. Zaplana si cita a ETA. Habla de 30 años de terrorismo y de 800 muertos.. Añade que el Gobierno está informando a la opinión pública con “total y absoluta” transparencia.
En Pamplona, el panadero Ángel Berroeta, de 61 años y simpatizante de Batasuna, discute con la esposa de un policía. La mujer pretende colocar en el establecimiento un cartel con la inscripción “no al terrorismo, ETA no “. La negativa del propietario degenera en una fuerte discusión sobre la autoría del atentado de Madrid. Minutos después, la mujer baja con su marido. El policía mata al panadero pegándole cuatro tiros. Luego llama a sus compañeros, y se entrega.
En la sede del PSOE siguen por televisión la aparición pública de Zaplana. Alfredo Pérez Rubalcaba consulta con Zapatero si deben responderle o no. El líder socialista no es muy partidario de quebrar la jornada de reflexión, pero al final accede a que Rubalcaba lea un mensaje escueto a las dos de la tarde. Lo hace con aire institucional: “Los ciudadanos reclamaban ayer información sobre la barbarie cometida en Madrid. Reclamaban información, pedían seguridad, necesitaban confianza y se la tenemos que dar “.
Una hora después, Ángel Acebes comparece en el ministerio del Interior. Rechaza que haya indicios de un terrorista suicida entre las víctimas del atentado. Reconoce que no hay pistas nuevas que conduzcan a Al Qaeda. Y añade: “Ningún responsable policial me ha dicho que exista ninguna preferencia en la investigación por Al Qaeda. La prioridad es la banda que lleva 30 años y 900 muertos en España “. En esos momentos, la policía está desplegada en diversos puntos de Madrid. Llevan más de 24 horas detrás de varias pistas que proceden del teléfono móvil encontrado dentro de una bolsa de deportes y conectado a 10 Kg. de explosivo Goma2-ECO. Las pistas les llevan a Alcorcón y al barrio de Lavapiés. Buscan a cinco ciudadanos marroquíes, dos indios y dos españoles de origen indio. Oficialmente, esos sospechosos son detenidos a las “cuatro de la tarde”. Media hora después de que los sospechosos sean detenidos en Alcorcón y Lavapiés, los medios de comunicación se enteran de la noticia. Pese a su importancia (supone la confirmación definitiva de que no ha sido ETA) nadie de atreve a difundirla.
Falta la confirmación oficial. No obstante, el rumor recorre el país a un ritmo vertiginoso. Las ganas de saber inundan el correo electrónico, y sobre todo, los teléfonos móviles. Hay mensajes de texto, los llamados SMS, que van de una punta a otra del país con idéntico mensaje. Lo hacen en castellano, en gallego, en catalán....” Hoy 13-m a las 18.00. Sede del PP, calle Génova 13. Sin partidos. Silencio por la verdad. Pásalo. Queremos la verdad antes de votar “. A las cinco de la tarde y cuatro minutos, la agencia EFE envía un teletipo a sus abonados, que son 400 diarios en España y América, 100 revistas, todas las cadenas de radio, 86 canales de TV y 1.200 portales de Internet, con un título muy curioso a esa hora de la tarde: “Las pistas apuntan a ETA y descartan a Al Qaeda “. El despacho, de 1.043 palabras, bastante más extenso de lo habitual en la agencia, está firmado por MP (Miguel Platón, director de Información de EFE). Junto a esa firma, y donde normalmente figuran las iniciales que identifican al editor, solo se ve: --/.../.
Nadie en la agencia ha querido suscribir lo que Platón sostiene: “Los elementos de la investigación efectuada hasta ahora por los servicios policiales y de inteligencia españoles respaldan la autoría de la banda terrorista ETA “. La calle Génova empieza a poblarse de gente. Gente que no se conoce de nada. Parece haberse instalado un silencio oficial. No hay noticias desde el Gobierno. Solo se mueve la calle. Pero el día dista mucho de parecerse a una jornada de reflexión. Mariano Rajoy sigue en su casa, descansando, aparentemente ajeno a cuanto está sucediendo. Zapatero, no. Está reunido con José Blanco, Jesús Caldera, y Alfredo Pérez Rubalcaba, en la planta 4ª de Ferraz. Aquí no hay silencio. La espera se hace tensa. Los teléfonos no paran de sonar. No entienden ese silencio, esas detenciones (de las que hace rato que tiene noticias) que no salen a la luz pública. A media tarde, Zapatero llama a Acebes. No está “accesible” en ese momento. Tarda una hora en responderle.
A la centralita del 091 llega una llamada de Telemadrid. Son las 19.40 del sábado. Una llamada anónima comunica que se ha depositado una cinta de vídeo en una papelera, cerca de la mezquita de la M-30. El silencio está a punto de romperse. La noche cae con fuerza sobre la jornada de reflexión.
La policía llega a la papelera, y acordona la zona. No es una trampa. Es un vídeo con una reivindicación de Al Qaeda. A las 19.50, la cadena SER informa de que hay cinco detenidos. A las ocho de la tarde, comparece Ángel Acebes en la sede del ministerio del Interior. Ya ha hablado con Rubalcaba. Una conversación muy tensa. Sabe que la noticia se ha filtrado. Informa a la opinión pública de que se han producido siete detenciones en el curso de la investigación. Acebes concluye su comparecencia con una frase: “Creo que no debemos descartar nada”.
En esos momentos ya hay unas 1.000 personas frente a la sede del PP en Sevilla, y unas 5.000 frente a la de Madrid, coreando: ¡ Ya he reflexionado...y no te voy a votar ¡ y también...¡ Queremos la verdad...antes de votar ¡. La peculiar jerga de los mensajes no deja de fluir en los móviles: Conéctate a Blooberg.com y new york times todo el mundo escandalizado x la manipulación y mentiras del PP. Pásalo. “¿Se va a ir Aznar de rositas? “. Mariano Rajoy acaba de llegar a la sede del PP. Desde el coche, un Audi A8 blindado, observa el gentío que grita. Tiene que acceder por el garaje de la calle Zurbano. Se encuentra con que algunos de sus colaboradores quieren salir a la calle y replicar a los manifestantes. El candidato del PP los tranquiliza. Decide que lo más práctico será comparecer en TV para denunciar lo que está sucediendo. Y aparecen en pantalla a las nueve de la noche, hora de comienzo de la mayoría de los informativos.
A su lado, Rodrigo Rato, número dos del PP por Madrid. De fondo el anagrama de su partido. Rajoy afirma que se está produciendo una manifestación “ilegal e ilegítima” que rodea toda la sede del partido. “Se trata de unos hechos gravemente antidemocráticos que no se habían producido nunca en la historia de nuestra democracia. La intervención de Rajoy provoca indignación en la sede de Ferraz. Los socialistas llevan toda la tarde recibiendo llamadas. Pascual Maragall, Felipe González, José Bono, Manuel Chaves...están indignados. Opinan que hay que contrarrestar las declaraciones de Rajoy. Zapatero, muy reacio durante todo el día, va cediendo. Al final acepta que sea Rubalcaba quien salga a la arena.
La respuesta a Rajoy se produce media hora después. Rubalcaba vuelve a la escena. Está enfadado, pero intenta medir las palabras. Sabe que está en medio de una partida. Y que hay mucho en juego. “ Los ciudadanos españoles merecen un Gobierno que no les mienta, que les diga siempre la verdad. El partido socialista conoce las líneas de trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. A pesar de ello, por sentido de Estado, y por respeto a la memoria de las víctimas, hemos estado callados “.
De distintos barrios de Barcelona salen grupos de manifestantes para encontrase en la plaza de Sant Jaume primero y en la sede del PP, en la calle Urgell, después. A las diez de la noche hay 5.000 personas reunidas ante el cuartel general de los populares en Cataluña. A las doce de la noche suman 7.000. Las palabras de Rubalcaba indignan al Gobierno. A las 23.30, comparece Zaplana en TV. No lo hace desde su despacho, sino desde la agencia de noticias EFE, en la calle Espronceda. Se monta un escenario imitando la sala de conferencias de Moncloa, con su atril y su bandera: “Lamento tener que comparecer, pero lo hago obligado ante las graves acusaciones formuladas por un portavoz que en comparecencia pública ha acusado al Gobierno de mentir a la opinión pública....eso es falso y el PSOE lo sabe “. El PP denuncia ante la Junta Electoral Central, integrada por ocho magistrados del Supremo y cinco catedráticos, la celebración de concentraciones ante sus sedes.
Denuncia también la comparecencia de Rubalcaba ante la opinión pública y a CNN+ por emitir esta comparecencia y también la concentración ante Génova. A las 23.29 del sábado, TVE emite de forma sorpresiva la misma película sobre el asesinato del parlamentario socialista vasco Fernando Buesa y su escolta, Jorge Díaz, a manos de ETA, “Asesinato en febrero “. A las 00.40, Acebes anuncia que el video encontrado en la papelera contiene una reivindicación de Al Qaeda. Después de más de tres horas de reunión, a las dos de la madrugada, la Junta Electoral Central considera que ni Rubalcaba en su comparecencia, ni CNN al retransmitirla han infringido la ley. A las cuatro de la madrugada, la gente sigue gritando en la calle: “¡Antes de votar, queremos la verdad ¡ “.
DOMINGO 14 de marzo: Ángel Acebes convoca a la prensa a las 14.15. Ofrece algunas precisiones sobre el avance de la investigación. Deja atrás toda mención a ETA. Anuncia que la investigación va a ser larga y compleja. Se han efectuado registros en domicilios y comercios del barrio de Lavapiés, donde la policía se ha incautado de material de telefonía móvil que pudiera tener relación con el teléfono y la tarjeta conectados con la bomba desactivada dentro de una bolsa de deportes en la madrugada del jueves al viernes. Tres de los detenidos son marroquíes y tiene antecedentes. Uno de ellos, Jamal Zougam, originario de Tánger, aparece citado en un sumario que abrió el juez Baltasar Garzón tras la desarticulación en noviembre de 2001 de la célula de Al Qaeda en España. Pero la ministra de AA.EE., Ana Palacio, sigue erre que erre. Le preguntan en la cadena británica BBC y contesta: “La idea de que ETA puede estar detrás se mantiene con fuerza”.
Mientras, las autoridades internacionales se movilizan. Italia destina 4.000 soldados a vigilar estaciones y aeropuertos. El Gobierno británico ordena desplegar agentes de paisano armados en trenes, estaciones de metro y ferrocarril. Alemania solicita una reunión urgente de los ministros de Interior de la UE. Pero Ana Palacio en la BBC sigue manifestando que la pista etarra se mantiene “con fuerza” en la investigación sobre los autores del atentado. Dice la ministra española: “Todo es posible en este mundo de tinieblas “. Cuando Aznar y Rajoy, acompañados de sus respectivas esposas, llegan a los colegios electorales para depositar su voto, son recibidos al grito de: ¡mentirosos ¡ y ¡ manipuladores ¡.......
Más información sobre los atentados:
http://3diasdemarzo.blogspot.com.es/200 ... chive.html

“ Estoy llegando a una edad en la que no necesito que me quieran, con que no me toquen mucho los cojones es suficiente”.