El cómico Dieudonné, en el banquillo por apología del terrorismo.
Debate paralelo sobre los límites de la libertad de expresión.
Hoy arranca el juicio contra el polémico francés.
Escribió en Facebook tras los atentados de París que se sentía como uno de los terroristas.
La fiscalía francesa reclama 30.000 euros de multa al polémico humorista Dieudonné.
El comediante francés Dieudonné, a su llegada a los juzgados de París. AFP.
¿Cuáles son los límites de la libertad de expresión? ¿Cuándo deja un chiste de tener gracia para convertirse directamente en un delito? Ésas son las cuestiones trascendentales sobre las que está llamado a pronunciarse la sala 17 de los Tribunales Penales de París.
Allí ha arrancado hoy el juicio contra el polémico cómico francés Dieudonné, acusado de un delito de apología del terrorismo después de que la noche del 11 de enero (unas horas después del atentado contra la revista satírica Charlie Hebdo y contra un supermercado de comida judía de París) escribiera en su página Facebook "Je me sens Charlie Coubaly" (Yo me siento Charlie Coulibaly). Con la precisión de que Coulibaly era como se llamaba el tipo que el 8 de enero mató a una policía e hirió gravemente a otro en Montrouge, una barriada al sur de París, y que al día siguiente irrumpió en un supermercado de comida judía, donde mató a cuatro personas e hirió gravemente a otras cuatro antes de ser abatido por las fuerzas de seguridad francesas.
La fiscalía francesa ha reclamado 30.000 euros de multa al polémico humorista. El fiscal, según medios franceses, solicitó en el Tribunal Correccional de París que se tenga en cuenta la declaración que motivó la denuncia, el contexto en el que se hizo y la personalidad de su autor, condenado en anteriores ocasiones por antisemitismo e injurias públicas.
Dieudonné, quien tiene a sus espaldas un amplio historial judicial por comentarios antisemitas y dos condenas por ese motivo con multas que en total ascienden a 48.000 euros, se supone que pretendía hacer un chiste con el famoso "Je suis Charlie Hebdo" (Yo soy Charlie Hebdo"), la frase que dio la vuelta al mundo y que se convirtió en emblema de solidaridad con esa revista después del atentado jihadista que sufrió el 7 de enero y en el que murieron 11 personas.
Pero la 'bromita' le puede salir cara: la legislación francesa contempla desde noviembre pasado el delito específico de apología del terrorismo, castigándolo con penas de hasta siete años de prisión. Ya el pasado 14 de enero, y siempre después de que publicara en las redes sociales la controvertida frase, el comediante fue arrestado por apología del terrorismo, aunque pocas horas después fue puesto en libertad.
El abogado del cómico, Sanjay Mirabeau, considera que infundada la acusación de incitación al terrorismo que pesa sobre su cliente y ya ha dejado claro que solicitará su liberación sin cargos. "Su trabajo es hacer reír a la gente, sus palabras no se pueden tomar como un delito", ha declarado 'Le Figaro'. Las asociaciones judías, sin embargo, consideran al comediante un peligroso antisemita que no sólo niega el Holocausto sino que incita a la violencia contra los hebreos.
Dieudonné cuanta con numerosos detractores, pero también tiene una corte de fans entregados, como ya se vio la semana pasada, cuando fue acogido con aplausos y vítores a su llegada a los tribunales de París. Ahora, de cara a este nuevo juicio, en las redes sociales hay en marcha una campaña de solidaridad con él bajo la etiqueta "#JeSuisDieudo".
http://www.elmundo.es/internacional/201 ... b4583.html
... Libertad de expresión en Francia? ... y una soberana mierda que se coman, sobre todo su "justicia" ... fariseos de mierda! ...
