Ver citas anteriores
José escribió: ↑27 Oct 2021 13:57La minarquía es un modelo de un Estado cuyas únicas funciones son proporcionar a sus ciudadanos la policía y los tribunales, protegiéndolos de la agresión y el robo, y haciendo cumplir las leyes de propiedad. O sea, el Estado debería restringirse a sus funciones "mínimas" o de "vigilante" (esto es, tribunales, policía, prisiones y fuerzas de defensa). El término "estado vigilante nocturno" fue acuñado por el socialista alemán Ferdinand Lassalle en un discurso de 1862 en Berlín. Incluir la Sanidad en la gestión pública no es minarquista. Por eso yo, desde el principio, he dicho que me muevo entre el minarquismo y el liberalismo clásico.
Excluir la educación de las funciones básicas del estado no es liberal clásico, porque como ya repetí hasta el cansancio, la educación pública ha sido siempre una de las banderas básicas del liberalismo clásico, es imposible pretender ser liberal clásico y estar en contra de la educación pública, por eso te moverás entre el minarquismo y no se que otra cosa, pero al liberalismo clásico no te acercas ni por asomo con tu concepción privatizadora de la educación.
Ver citas anteriores
José escribió: ↑27 Oct 2021 13:57Ya te dije en una ocasión que yo no me dejo llevar por las etiquetas que interesadamente le ponen los partidos estatistas y los medios vendidos y desinformadores a los políticos que se salen del discurso políticamente correcto y quieren revolucionar las estructuras estatales. A mí esos términos de "ultraderechista", "ultraconservador", "extremaderecha" me resbalan totalmente. Y allá aquel que se deje influenciar por esa estrategia, porque será un esclavo del sistema.
Me parece perfecto que no te dejes llevar por las etiquetas, a mi también me resbalan todas las etiquetas, incluidas también aquellas que los ultra-derechistas interesadamente ponen a todo aquel que no piense como ellos, sea de centro-izquierda, centro e incluso de centro-derecha, etiquetas tales como: "comunistas", "derechita cobarde", "palomas", "tibios social-demócratas", "consenso social-demócrata", "ideología de género", y hasta "ideología del clima", porque la mayoría de los ultra-derechistas niega el cambio climático. También creo que quién se deje influenciar por esas etiquetas se convierte en un esclavo del sistema reaccionario y ultra-conservador que defiende la ultra-derecha como modelo de sociedad, y ese modelo no busca que la gente sea mas libre, todo lo contrario, busca que la gente sea menos libre, en todos los campos donde se puede hablar de la libertad. Por algo todos los partidos liberales europeos, independientemente de la corriente interna del liberalismo a la que adhieran, han apoyado a los demócratas Bill Clinton, Al Gore, John Kerry, Barack Obama, Hillary Clinton, y Joe Biden, cada vez que hubo elecciones presidenciales en Estados Unidos en los últimos 30 años, nunca, en cambio, han apoyado a un candidato republicano.
Ver citas anteriores
José escribió: ↑27 Oct 2021 13:57Yo no sé cómo se ha dado la situación en el resto de Europa. Pero sí sé como se ha dado en España y en Latinoamérica. En estos países, liberales y conservadores han ido de la mano hasta la derrota del comunismo tras la caída del Muro de Berlín. Momento en el cual, comenzaron a competir entre sí.
En el resto de Europa, pues como te dije en el mensaje anterior, esa conjunción liberal-conservadora anti-socialista y anti-comunista de la que hablas no ha existido nunca, y si no existió nunca es porque desde principios del siglo XX, gracias a la división del movimiento obrero europeo entre una social-democracia reformista, nucleada en la Internacional Socialista y Obrera, y una ortodoxia marxista-leninista, nucleada en la Internacional Comunista, los partidos reformistas social-demócratas, laboristas y socialistas, empezaron a ser aceptados en Europa como "parte del sistema democrático-capitalista" que quería evitar una revolución de estilo comunista bolchevique fuera de Rusia. Tal es así, que fue gracias a la social-democracia que Alemania pudo evitar una revolución comunista-bolchevique en 1918-1919, al ordenar el social-demócrata Friedrich Ebert, apoyado por la inmensa mayoría del Partido Social-Demócrata de Alemania (SPD), la represión violenta de la extrema izquierda comunista, esa represión violenta le costó la vida a conocidos líderes de la ultra-izquierda revolucionaria de aquella época como Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht. ¿Has oído hablar alguna vez de la coalición de Weimar?: pues esta fue una coalición de gobierno que mantuvo en pie la democracia en Alemania durante el período 1919-1930, y estaba integrada por tres partidos políticos: el Partido Social-Demócrata de Alemania (SPD), el Partido Demócrata Alemán (DDP), de ideología socio-liberal y liberal clásica, y el Partido del Centro Alemán (DZP), de ideología católica y demo-cristiana. Cuando dicha coalición perdió su mayoría parlamentaria en las elecciones generales de 1932, la democracia alemana cayó, porque la mayoría de los alemanes votaron por la ultra-derecha: Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán (NSDAP), y por la ultra-izquierda: Partido Comunista de Alemania (KPD), ya que ambos partidos extremistas odiaban a la democracia por igual y querían establecer su propia dictadura autoritaria, lo demás es historia conocida, los nazis triunfaron sobre los comunistas por el miedo a una dictadura comunista-bolchevique, que en ese momento era mayor al miedo a una dictadura nazi-fascista.
El rol de los social-demócratas como "parte del sistema democrático-capitalista" se consolidó en Alemania Occidental y en toda la Europa capitalista luego de la Segunda Guerra Mundial. En las elecciones generales alemanas de 1949, las primeras desde la caída de la dictadura nazi, el líder de los social-demócratas alemanes, Kurt Schumacher, dijo en palabras textuales lo siguiente:
"los comunistas son fascistas pintados de rojo". Si el demo-cristiano conservador Konrad Adenauer pudo ser electo Canciller de Alemania Occidental en 1949, fue gracias al apoyo parlamentario de los liberales del Partido Demócrata Libre (FDP), porque los demo-cristianos conservadores de la CDU no obtuvieron la mayoría absoluta. Entre 1968 y 1982, los demo-cristianos conservadores de la CDU fueron el partido más votado en Alemania Occidental, sin embargo, durante ese mismo período, Alemania Occidental tuvo dos cancilleres social-demócratas: Willy Brandt y Helmut Schmidt, y eso ocurrió porque los liberales del FDP, prefirieron, tal como ocurre en la actualidad con el también social-demócrata Olaf Scholz, hacer un pacto de gobierno con los social-demócratas e investir como Canciller a un social-demócrata en vez de a un demo-cristiano conservador. Y ejemplos como el de Alemania Occidental entre 1968 y 1982 sobran en la historia electoral de Europa, y todo eso fue posible, por dos cosas: en primer lugar porque al ubicarse en el centro del espectro político, los liberales europeos pueden pactar tanto con los social-demócratas a su izquierda, como con los demo-cristianos y conservadores a su derecha, y en segundo lugar, porque al ser los social-demócratas europeos una familia de partidos capitalistas, los liberales europeos no tienen ningún inconveniente en pactar con ellos, tendrán diferencias que son muchas, pero como los social-demócratas son parte del sistema capitalista, la economía de mercado nunca se pone en discusión cuando los liberales europeos se juntan con ellos para formar gobierno.
¿Se entiende la idea?. ¿Para que me molesté en hacer toda esa referencia histórica de la social-democracia alemana y europea?, pues simplemente para decirte que la construcción política de un populista de derecha como Milei en Argentina no tiene nada que ver con la historia parlamentaria de coalición y consenso que rigió en la Europa capitalista entre 1918 y 1990, y en toda Europa desde 1990 hasta la actualidad, por ende las líneas rojas que propone Milei de no pactar nada con ningún partido social-demócrata afiliado a la Internacional Socialista son absurdas y un verdadero disparate que no tiene ningún asidero en la política europea del consenso y el acuerdo. La Unión Europea y su actual gobierno e instituciones, son hijas del acuerdo político tripartito entre social-demócratas, demo-cristianos-conservadores y liberales, sin dicho acuerdo Europa no podría funcionar. Por lo tanto las ridículas y absurdas líneas rojas de Milei de no pactar nada con los social-demócratas y excluirlos de todo, reitero es un absurdo disparate que no tiene asidero en ningún lugar de Europa, donde las únicas líneas rojas posibles son las de no pactar nada con la ultra-derecha euro-escéptica.
Dices que no sabes como se ha dado la situación en el resto de Europa, la cual ya expliqué anteriormente, pero si en España y Latinoamérica, pues déjame decirte que tampoco en España y en Latinoamérica, salvo algún que otro caso muy puntual, se ha dado esa conjunción liberal-conservadora de la que tanto hablas y que supuestamente ocurrió, según tu opinión, hasta la derrota del comunismo en 1990. Primero, porque tanto en España como en Latinoamérica hubo dictaduras militares durante gran parte del siglo XX, y por ende, los partidos políticos y las elecciones estaban prohibidas y proscriptas, en España mucho más que en Latinoamérica, ya que la dictadura de Franco duró 36 años. Pero en Latinoamérica, si hubo interregnos democráticos durante el siglo XX, y cada que vez que hubo elecciones, liberales y conservadores compitieron electoralmente entre sí, casi nunca fueron juntos o unidos, porque salvo en Cuba, Nicaragua, Guatemala y el Salvador, en el resto de Latinoamérica, y exceptuando a Chile durante el período 1960-1973, durante la mayor parte del siglo XX, no hubo partidos de izquierda revolucionaria o comunista fuertes o importantes, por eso, hubo bipartidismo y confrontación electoral entre liberales y conservadores en: Colombia (Partido Liberal Colombiano versus Partido Conservador Colombiano), Honduras (Partido Liberal Hondureño versus el conservador Partido Nacional Hondureño), Paraguay (Partido Liberal Radical versus el conservador Partido Colorado), Ecuador (Partido Liberal Radical Ecuatoriano versus Partido Conservador Ecuatoriano) y Uruguay (el liberal Partido Colorado versus el conservador Partido Nacional o Blanco). Y hubo bipartidismo y confrontación electoral entre demo-cristianos y social-demócratas en: Venezuela (el demo-cristiano COPEI versus la social-demócrata Acción Democrática) y en Costa Rica (entre el demo-cristiano Partido Social Cristiano y el social-demócrata Partido Liberación Nacional). En Argentina hubo bipartidismo entre el peronista Partido Justicialista, un partido populista que contenía en su seno facciones que iban desde la centro-izquierda hasta la centro-derecha conservadora, y la Unión Cívica Radical, que es un partido centrista, que contenía en su seno facciones que iban desde el liberalismo clásico pasando por el socio-liberalismo, hasta llegar a la social-democracia. Y finalmente, cito a Chile, porque lo cité antes como excepción donde si conservadores y liberales fueron unidos, pero solo durante corto período de tiempo, entre 1958 y 1973, cuando frente al auge de la democracia cristiana chilena, liderada por Eduardo Frei Montalva, y frente al crecimiento electoral de los Partidos Socialista y Comunista de la mano de Salvador Allende, los históricos Partidos Liberal y Conservador, que muchas veces han competido entre si desde mediados del siglo XIX hasta la década de 1950, aunque algunas veces apoyaban al mismo candidato a presidente, deciden fusionarse para crear el Partido Nacional.
Como ves la historia latinoamericana del siglo XX es variopinta y salvo excepciones, en la mayor parte de las elecciones llevadas a cabo, liberales y conservadores latinoamericanos se han opuesto entre si y han competido electoralmente entre ellos, en plena época de la guerra fría y en plena época de auge del comunismo a nivel mundial.
Ver citas anteriores
José escribió: ↑27 Oct 2021 13:57De hecho, ni siquiera se puede comparar lo que en España llaman "socialdemocracia" a lo que es, en realidad, en Europa. La socialdemocracia española, representada por el PSOE, es populista y tiene más que ver con Latinoamérica que con Europa. Si España no hubiera perdido parte de su soberanía y no estuviera bajo el amparo de Bruselas, hace años que estaría en una situación parecida a la de Argentina. Cuántas veces hubiera devaluado la moneda, cuántas veces se hubiera puesto a imprimir billetes, tendríamos una deuda pública y un déficit monstruosos. Todo eso lo impide la UE. El PSOE está más por aumentar el Estado, la burocracia y la corrupción institucional. Además de subir impuestos y clientelizar, con ellos, a un sector estratégico de la población para asegurarse en el poder. Políticamente, España es un país altamente latinoamericanizado. Y, por supuesto, yo estoy a favor de que se dé una alianza entre liberales y conservadores, tanto en Latam como en España. Todos tenemos el mismo problema, y es la izquierda populista corrupta, estatista (mafiosa) y empobrecedora.
Sí sí, José, esta bien, el PSOE se parece más al chavismo venezolano y al sandinismo nicaragüense que al Partido Socialista Portugués o al Partido Socialista Francés
. Y sin el paraguas de la UE, España sería como Argentina
, estas en lo cierto
. Creía que aunque disentíamos, estábamos hablando en serio. Vamos, José, no puedes creer realmente que España es un país "latinoamericanizado", la política española, aún con sus particularidades propias, como la inexistencia de partidos liberales y partidos verdes-ecologistas fuertes, y la existencia de partidos nacionalistas catalanes, vascos y gallegos, tanto de izquierdas como de derechas, se parece más a la de Portugal que a la de Argentina.
Puede que el PSOE actual sea menos centrista que el Partido Social-Demócrata de Alemania (SPD) en cuestiones fiscales, y que sea algo populista en algunos temas, pero no deja ser una centro-izquierda democrática y reformista, a pesar de todos sus errores, que son muchos, el PSOE no se puede comparar con la izquierda populista y autoritaria de Latinoamérica: chavismo, sandinismo, kirchnerismo, etc. No es mi intención defender al PSOE, ya que yo no me identifico con ningún partido político español actual, porque soy socio-liberal y en España no hay ningún partido que represente abiertamente esa ideología.
Ver citas anteriores
José escribió: ↑27 Oct 2021 13:57Por cierto, el hecho de que prefieras al socialista Gabriel Boric antes que a liberal-conservador José Antonio Kast, desluce bastante ese "liberal" que tienes en el nick de tu cuenta. A pesar de que haya cosas que no me gusten de Kast, por ser demasiado conservador, en algunos casos. Digamos que eres un izquierdista, a secas. En poco podríamos llegar a un entendimiento. Digamos que si formases parte de Juntos por el Cambio, en Argentina, tú estarías alineado con las "palomas" (tibios socialdemócratas partidarios de llegar a un entendimiento con el oficialismo) que con los "halcones" (liberales clásicos muy críticos con el kirchnerismo). Con razón Milei descarta entenderse con la primera corriente, ya que son los que le hacen el juego a la izquierda.
José Antonio Kast es un conservador-liberal en políticas fiscales y económicas, pero en políticas socio-culturales es un ultra-conservador reaccionario que justifica la dictadura de Pinochet, por algo su alianza electoral se llama Frente Social-Cristiano, se trata de una coalición ultra-conservadora, ultra-católica y ultra-cristiana. Para el Frente Social-Cristiano de Kast, los valores conservadores tradicionales y católicos, la familia tradicional, y la moral tradicional cristiana y católica, está por encima de la libertad del individuo a elegir como quiere vivir su propia vida, los liberales, independientemente de la corriente interna a la que adhiramos, jamás podríamos votar por un defensor de dictadores, por alguien que esta en contra de las libertades más básicas de los individuos en las cuestiones socio-culturales y por alguien cuyos asesores mas notables niegan el cambio climático. Boric jamás seria mi opción electoral en la primera vuelta, ya que no coincido con gran parte de su plataforma económica, dije que votaría por Boric en segunda vuelta solo si tuviera que elegir entre el y Kast. Y creo lo contrario, si fuera capaz de votar por un ultra-conservador cultural y social como Kast, la palabra liberal de mi nick si que se desluciría completamente, porque un socio-liberal europeo estaría horrorizado de las ideas ultra-conservadoras de alguien como Kast, que sería visto por cualquier socio-liberal europeo como un candidato de ultra-derecha.
Está claro que no coincidimos en lo que significa ser liberal, a mi criterio y al de cualquier liberal europeo, son liberales, los políticos que tienen una filosofía política socio-liberal, liberal clásica o liberal-verde, como el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau (socio-liberal y liberal-verde), la ex Senadora por el Estado de Nueva York, Hillary Clinton (socio-liberal), el líder de los liberales alemanes, Chistian Lindner (liberal clásico), o el Primer Ministro de Holanda, Mark Rutte (liberal clásico), yo jamás podría considerar como cercano al liberalismo a un ultra-conservador cultural como Kast, por más que este a favor de algunas políticas económicas laissez faire.
Por último, y en relación con la coalición opositora anti-peronista Juntos por el Cambio en Argentina, esa división entre "halcones" y "palomas" no existe en la realidad, porque ninguno de los políticos de Juntos por el Cambio que Milei denomina como "palomas" es realmente un social-demócrata, y ninguno de los que llama "halcones" es realmente un liberal clásico. Se trata de gente que ideológicamente piensa muy parecido entre sí en casi todos los temas de políticas públicas, lo único que los puede llegar a diferenciar es cierto estilo mas o menos confrontativo a la hora de oponerse al gobierno populista autoritario de la vicepresidente Cristina Kirchner, porque el "presidente" Alberto Fernández no gobierna ni en sueños, es solo un títere, un mascarón de proa, quien gobierna Argentina es Cristina Kirchner, y ese experimento ha resultado tan desastroso, que dentro de 15 días, la dupla de sátrapas autoritarios y populistas que ejercen los cargos de Presidente y Vice-Presidente de Argentina, llevarán al peronismo a la peor derrota electoral de su historia.
Saludos.