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Sánchez equipara a Rivera con la ultraderecha y reitera el diálogo con Cataluña y el acercamiento de presos de ETA
Sánchez tiene un problema. Y un problema serio.
Ha llegado a La Moncloa con ochenta y tantos diputados sobre un total de 350. Es decir, que le faltan la tira de votos para sacar adelante sus propuestas. Y los que le han subido al poder son partidos de extrema izquierda (Podemos y sus confluencias, Bildu, etc.) y partidos independentistas que van a decirle aquéllo del "qué hay de lo mío" para apoyarle. Esas amistades peligrosas elegidas por el tal Sánchez han dejado el centro político prácticamente ocupado en exclusiva por Ciudadanos. Vd. se ha escorado hacia la extrema izquierda y tiene pánico porque sabe que tiene complicado retener los votos de centro moderado que le podrían apoyar. Sánchez, para intentar remediar ese problemón que se le plantea, necesita utilizar el márketing para vender la imagen de un Ciudadanos escorado a la extrema derecha (en la extrema derecha está Vox, que pelearía con Ciudadanos, según Sánchez, por el mismo electorado) para no perder los votos de centro.
Y ahí está el motivo de que cargue de esa manera contra Ciudadanos. ¿No sería más lógico cargar contra el Partido Popular, que es el partido mayoritario? Pues no, carga contra Ciudadanos precisamente porque es su gran rival y por el motivo que he intentado explicar. Ni más ni menos.
Ciudadanos es exactamente el mismo partido con el que pactó el Sr. Sánchez hace no tanto para ser presidente del gobierno. ¿Quién ha cambiado, Sánchez?
Ciudadanos sigue defendiendo exactamente lo mismo que cuando firmó el acuerdo con Vd. Quien ha cambiado es Vd. porque sus ansias de sillón le han obligado a entregarse a partido leninistas (Alfonso Guerra dixit) y enemigos de la Constitución de 1978. Es decir, Ciudadanos no se ha ido a esa extrema derecha de la que Vd. habla, sino que, más bien, Vd. se ha echado en brazos de amistades poco de fiar.
Pero no se preocupe, siempre habrá gente y medios de comunicación que compren su publicidad.
Mire que a Vd. no le tenía, en principio, demasiada manía. No es que me cayese especialmente bien, pero sí tengo que decir que estaba expectante. Pues lo que llevo visto desde que Vd. es el Gran Hermano de la cosa, tengo que decirle que me está resultando un auténtico fiasco. Un bluf, un Zapatero v. 2.0.
Cada día que pasa me fío menos de Vd., así que, que sepa que le estoy poniendo en mi particular libretilla con muchas X de color rojo (como a Vd. le gusta), que significan, en mi caso, "personaje prescindible". Eso sí, le tengo que decir que queda muy resultón en sus montajes fotográficos para quien le guste. Guapo....
Váyase a paseo.
Edito: Y ahora vendrán todos los podemitas del foro (que son unos cuantos) a defenderle, ya verá.